lunes, 25 de marzo de 2013

la virtualización india



Probablemente, durante todo este tiempo, vosotros os habréis estado preguntando por qué no había ninguna nación que empleara las armas de fuego para quitarles la tontería tanto a los Galegans como a los demás. De hecho, habría sido un final rápido a esta guerra, pero las cosas no son siempre tan fáciles como las pintan:

El 25 de Marzo, dos años antes de que los Galegans iniciaran su guerra con The Marmalade Company, todos los países acordaron deshacerse de sus armas antiguas y ya obsoletas (excepto los Americanos, que querían conservar todas las armas que pudieran para regalárselas a sus hijos; eso sí, quemaron todos los videojuegos y destruyeron todo el ocio digital porque era muy violento y peligroso) para dar paso a una nueva generación de armas “inteligentes” o como les gustaba llamarlas: “Smart weapons” (si, Apple no tardó en sacar sus propias versiones con sus iGuns, sus iMachineguns o sus iSnipers, que causaron furor en la comunidad hipster) las cuales, estaban controladas por un sistema informático que les impedía atacar a los aliados, tenían un radar incorporado, un reloj, una aplicación de predicción del tiempo, el wassap y por supuesto el angry birds (bueno, las versiones americanas no tenían esta última aplicación porque resultaba muy violenta y peligrosa como hemos comentado más arriba).

En aquellos momentos, las armas de fuego convencionales casi no existían… y fue entonces cuando los indios realizaron el Poderoso-y Universal-Tecno-Ataque-Secreto o PUTAS para abreviar, que consistía en un hackeo a gran escala y a un nuevo e insuperable nivel con el cual destrozaron absolutamente todos los sistemas informáticos que existían, y eso incluía a las “Smart weapons”.

Los indios trabajaron duramente para diseñar el invento definitivo: el Poderoso - Espacio - Neutrocibernético - Intradimensional - Supervirtualizador, también conocido como PENIS (si, estos indios no tienen ni puta idea de poner nombres) con el cual, podían introducirse en el mundo virtual y desde allí hacer lo que quisieran con los sistemas o programas informáticos, ya sea desde robar todo el dinero de una cuenta corriente hasta trolear al típico niño-rata que con sus 12 añazos ya juega a Call of Duty y se cree muy bueno el cabrón por campear.
El principal problema era que necesitaban mucha pero mucha energía para realizar esta "virtualización", por lo que los indios, en un arrebato de originalidad y coraje (par de cojones) secuestraron a Thor, el Dios del rayo, le enchufaron un cable en cada pezón y empezaron a pillar su energía como si de ordeñar a una vaca se tratara.
Otro gran problema eran los indios gordos, que ocupaban mucho espacio, así que les pusieron a correr en ruedas de hamster gigantes que funcionaban como dinamos para conseguir más electricidad. De esta manera, conseguían matar dos pájaros de un tiro: los niños gordos adelgazaban y les proporcionaban más energía.

En mitad de esta operación, los rellenitos (los gordos antes comentados) se sublevaron por las malas condiciones en las que estaban, pero el comandante Adhapuh Mjindhala les calmó regalándoles fresisuis (lo suficiente como para que siguieran gordos y por lo tanto tuvieran que seguir corriendo) con lo cual ellos siguieron generando electricidad contentos y la operación de la virtualización siguió su rumbo.

Pero el objetivo de esta virtualización en masa de la India, era la de dejar las nuevas armas inservibles para que no hubiera más guerra (los pobres insensatos no conocían el poder destructivo que tenía un garrote en manos de un Galegan eso sí), era un objetivo pacifista que habría hecho un gran favor al mundo. Y de hecho, consiguieron su objetivo, pero el problema vino cuando trataron de salir:
Los genios habían conseguido un método seguro para entrar en el mundo virtual, pero no habían ideado ningún método para salir de allí, por lo que los indios quedaron confinados dentro de su propia invención, condenados a acostumbrarse a vagar por el vasto mundo del internet, a las continuas migraciones de host, al lag y a las pilinguis virtuales.

Pocos indios soportaron estas condiciones y el resto acabó por suicidarse. Algunos pillando intencionadamente un virus mortal (de esos de los que te avisan los pesados de tus contactos por e-mail) y otros pirateándose a sí mismos hasta que explotaran salpicando y manchando todo con píxeles de color rojo.

Fue muy duro conseguir testimonios de los indios después de su virtualización, pero actualmente hay algunos archivos guardados de sus intentos de contactar con el exterior. Obviamente no obtuvieron respuesta ya que nadie tenía los recursos necesarios para mantener el contacto con ellos.

Esa fue una heroica proeza por parte de los indios, pero también una insensatez inútil, ya que la guerra se desató de todas formas, como ya os hemos comentado, con algo tan simple como el naufragio del “Prestige” en las costas Galegans.

jueves, 21 de marzo de 2013

Ealtcuaque


La táctica del “telemoto” (nombre en clave: Ealtcuaque), consiste en que todos y cada uno de los habitantes de china, ayudados de unos cuantos massai voluntarios, saltan al mismo tiempo provocando al caer un terremoto de esos que cuando acaban siempre hay un viejo estadounidense  viendo la tele al que se le cae la fachada de su casa y le dice a su mujer mientras ésta flipa con la escena: “¡¡¡Doris, creo que llaman a la puerta!!!”. ¿Tenéis la idea no? Bien. Bueno pues el objetivo de estos terremotos es matar… sí, pa que nos vamos a engañar, ¡¡no van a hacer un terremoto para ver si crecen los gladiolos del jardín!!… Querían matar a las tropas de superhombres superborrachos rusas a la par que a sus osos sanguinarios. No tuvo el efecto deseado puesto que no mataron rusos, solo consiguieron abrir un desfiladero tan ancho como el culo de Falete (cosa que no estaba mal) y cambiar totalmente el eje de rotación terrestre poniendo la Tierra del revés. Hubo polémica en lo que a este hecho se refiere porque los alemanes no querían aparecer al Sur en los mapas y los australianos apoyados por la CDPDPS (Confederación De Pingüinos Del Polo Sur) pretendían estar al Norte, puesto que decían que siempre cabeza abajo se les subía la sangre y se mareaban, no se sabe aún de dónde sacaron semejante gilipollez, el caso es que por vaguería al final no se cambio nada.

A pesar del fracaso de la táctica, a la mañana siguiente los rusos, a causa del pedal que llevaban, fueron persiguiendo una botella de vodka que se les había caído rodando por culpa del terremoto la noche anterior y se cayeron dentro de la zanja, muriendo los primeros miles, hasta que se llenó la zanja (esto hace pensar en la enormidad del culo de Falete) y el último y único superviviente consiguió agarrar la botella y bebérsela, luego se dio cuenta de que la botella estaba vacía y cuando se le pasó el pedo comprobó que ni siquiera era una botella, sino una zarigüeya, de ahí que hubiera rodado tanto tiempo e incluso hacia arriba. (Táctica perteneciente a las Campañas Rusas)

Aquí se observa un batallón del ejército del salto chino en el momento de ejecución de la táctica.

miércoles, 20 de marzo de 2013

Las campañas rusas


Después de la pérdida de Siberia, los rusos sentían que su honor había sido ofendido, así que su única forma de recuperarlo era conquistar nuevos territorios… o eso es lo que ellos tomaron como excusa.
En realidad los rusos llevaban un tiempo queriendo dominar Polonia, que es el país que importa casi el 70% del absolut vodka. Tenían sus objetivos y sobre todo sus prioridades más que claras, así que después de que los Burgalians terminaran oficialmente de invadir Siberia, los rusos comenzaron lo que se llamó “la campaña rusa”.

Esta campaña, por motivos no previstos ni planeados acabó por dividirse en dos campañas independientes: La campaña del oeste o “campaña del Vodka” y la del sur más tarde conocida como "where da fuck are we going". Dichos motivos eran en realidad consecuencia del modus operandi que tienen los rusos de hacer las cosas: beber suficiente Vodka hasta adquirir el estado de super-ruso e invadir todo lo que puedan antes de que se acaben las reservas del Vodka y por lo tanto llegue la resaca.

Pues bien, en la campaña del oeste, los rusos sabían (más o menos) el camino que tenían que tomar para llegar a Polonia, la nueva tierra prometida, así que provistos de cientos de miles de botellas de Vodka que habían escondido bajo tierra y en varios búnkeres (por si acaso llegaba una hecatombe nuclear, pues al menos eso que tenían) un enorme ejército de rusos, con algunos pelotones formados por osos como aliados, cruzaron los Balcanes para llegar a Europa; su destino.
El problema fue que se perdieron un poco por el sistema montañoso, ya que ni los rusos ni los osos saben leer mapas y si además están borrachos, pues peor aún. Pero finalmente llegaron a Europa… aunque no a la zona que ellos querían.

Tuvieron que dirigirse al norte desde Ucrania, conquistando todos los territorios que encontraban hasta llegar a Polonia. En su sinuoso camino invadieron Hungría, Eslovaquia, Serbia y todas esas ex repúblicas soviéticas que no les importaban una mierda pero que les servían para aumentar sus víveres de alcohol. Finalmente, al llegar a Polonia, los rusos se pusieron como locos y el país fue conquistado en una tarde.

Después de esto, los polacos recibieron el logro de “murallas de palo” el cual solo lo puede conseguir una nación al ser conquistada más de 3 veces en menos de 100 años.
Eh aquí el emblema que recibieron los Polacos por parte de Microsoft. Sí, Microsoft pasó a dominar muchos otros sectores después de la Virtualización india (incluyendo como es obvio el sector de los récords, el de la comida rápida y el de los bates de baseball), pero esa es otra historia.
La noche después de invadir Polonia, los osos se sublevaron porque los rusos no les daban o no les querían dar suficiente Vodka como para que montaran sus juergas de osos en sus cuevas. Hubo así una batalla que acabó con el amanecer del día siguiente:
Al noveno día, los rusos y los osos, que llevaban todo el tiempo que duró la campaña ciegos de Vodka, sufrieron una resaca extrema que diezmó sus tropas e incluso llegó a confundirse con una nueva enfermedad debido a sus síntomas extremos.

Por otra parte, la campaña rusa del sur fue muchísimo más rápida: duró apenas tres días. Los rusos habían conseguido llevar a cabo la ofensiva más eficiente que nadie jamás consiguió realizar, conquistando Toda Mongolia y parte del norte de China en un periodo de tiempo tan reducido, y además lo hicieron rusos íntegramente, es decir, sin ayuda de los osos, que como todo el mundo sabe, tienen una alianza con los rusos desde enero del 1987.
General Osacus el Blanco, Gran maestro y líder de los osos de toda Rusia así como alumno predilecto de Gandalf el Blanco en su otra vida, desde una piscina de Vodka sin alcohol (agua) dando el visto bueno a la alianza con los rusos. El general Osacus el Blanco, Es uno de los pocos osos polares albinos que han conseguido sobrevivir.
Comenzaron conquistando sus propios territorios en Rusia en la batalla de “Russkij Pusskij” que empezó por una disputa que tuvo el general Dimitri Gaskokvij  (Димитрий Гаскоквих) con unos pueblos que no les querían ceder su Vodka. El resultado fue el completo arraso de dichos pueblos y el saqueo de sus bodegas de Vodka hasta que quedaran más vacías que una clase de física opcional.

Más adelante, los rusos llegaron a Mongolia y como es lógico, arrasaron con todo en las batallas de “weird people” convirtiendo a los supervivientes a su religión, inventada eso sí, durante la tarde del día anterior mientras iban hacia dicho país.

Y finalmente, llegaron a China. En principio se dedicaron a pegarse con todo el que tuviera los ojos cerrados, pero el problema es que algunos rusos peleaban en un estado sonámbulo, con lo cual se confundían muchas veces y le partían la cara al que no era, así que cambiaron de estrategia y solamente repartieron hostias a lo que se pusieran de color amarillo chillón cuando les agarraran de las pelotas.

Siguiendo esta estrategia, en un solo día llegaron a Beijing (a Pekín) y confusos porque no encontraron el Vodka que esperaban encontrar en Polonia, bebieron sus últimas reservas de Vodka, quedando desprotegidos ante la resaca del día siguiente.

Aprovechando el estado de debilidad máxima en el que estaban los rusos (no solo por dicha resaca sino también por la desmoralización de sus tropas al no tener Vodka) los chinos llevaron a cabo un ataque a gran escala obligando a todo el mundo a participar (tanto niños-polla como ancianos-fumanchúes) incluyendo también a  sus aperitivos del día siguiente (gatos y ratas).
Recuperaron sus tierras en poco tiempo, pero no se quedaron ahí, sino que siguieron avanzando hasta conquistar Kazakstán junto a todos esos países cuya pronunciación es imposible a menos que se conozca la lengua de mordor, así como la antigua Mongolia y más de la mitad de Rusia. Todo ello gracias a su táctica “Earthquake”, o como ellos la llamaban “ealtcuaque” o "telemoto" (para más información, ve a tácticas de guerra o simplemente pincha aquí).

De esta manera tan desastrosa, acabaron las campañas rusas. Los rusos habían perdido casi todo su territorio pero estaban felices por haber llegado a su paraíso. Los chinos, por otra parte, habían ampliado muchísimo sus territorios, hasta el punto de conquistar Moscú, donde los Burgalians debían ir para llegar a la base secreta y subterránea y luego a la base supersecreta y supersubterránea donde se encontraba toda la información que necesitaban los Galegans. Por suerte dichas bases no fueron descubiertas, pero era demasiado peligroso y arriesgado el llevar a cabo una operación para conseguir los documentos.

martes, 12 de marzo de 2013

La del circo


La táctica de reclutamiento forzoso de militares de corta y media edad (nombre en clave: La del circo), consiste en que el bando reclutador viaja en un tren en el cual viaja el ejército de asalto al completo, dos cocineros y un cerdo al que usarán para hacer morcilla. Cuando llegan al lugar de reclutamiento paran el tren, abren una carpa y se hacen pasar por un circo ambulante de malabaristas con bolas de petanca, equilibristas sobre bolas de petanca y levantadores de peso de bol… de petacas… llenas de alcohol de 103º (luego se extrañaban los burgalians de tener calor en Siberia). El caso es que niños de todas las edades 5, 6, 8, 13 y fracasados de 54 que aún vivían en casa de sus padres, e incluso padres fracasados de 78 años que vivían en casa de sus padres con sus hijos de 54, acudían atraídos por las grandes multitudes, que no eran otras que el ejército, al “circo” en el cual les hipnotizaban para posteriormente obligarles a prepararles otras comidas, puesto que la morcilla proveniente del cerdo se les acabó en Briviesca (pinchar aquí para ver, se recomienda alejar la vista un poco y mirar hacia el noreste). A los niños franceses les obligaron a hacer quesos y croissant, a los alemanes salchichas etc. Y así pasaran por donde pasaran conseguían niños esclavo-hipnotizados los cuales les preparaban ricas comidas, amén de servirles como blancos para jugar a la petanca, enterrándoles en el suelo hasta el cuello. Aunque el viaje así no lo requería, bajaron hasta Grecia también ya que habían oído que allí hacían un yogurt muy bueno. Allí conocieron a Papalukas, un griego muy cachondo, pero como no viene al caso ahora no contaremos su historia. (Táctica perteneciente a La operación calor)

Aquí se aprecia a 4 burgalians jugando a la petanca, a quince metros o trescientos se ve la cabeza de un niño irlandés, que aunque no les pillaba de camino Irlanda tampoco, los niños irlandeses eran los mejores para hacer de blancos por su llamativo pelo color zanahoria

La operación calor


Los Galegans estaban sometidos a una cansina campaña Francesa que básicamente consistía en la continua llegada de más y más tropas para asediar las ciudades cada lunes después de tomarse su café francés con unas tostadas de mermelada de naranja que The Marmalade Company les regalaba.

En esta situación, los Galegans apenas podían defenderse, así que no podían gastar ningún recurso o tropa para ir a Rusia a descubrir las intenciones que tuvieron al hacer naufragar al “Prestige”.
Pero por suerte para ellos, no muy lejos de las tierras Galegans -al sureste más concretamente– se presentaron voluntarios los burgaleses para comenzar la operación de Rusia. Ellos siempre quisieron ampliar sus territorios y la única zona que tenía un clima parecido al de Burgos era Siberia, por lo que vieron una oportunidad de oro: ellos conquistaban parte de Rusia y a cambio les informarían de todo cuanto descubrieran a los Galegans.

Comenzó así esta operación conocida como la “operación calor”, en la cual, los Burgaleses o Burgalians (nombre de guerra que ellos mismos se habían adjudicado) viajarían en trenes europeos desde Francia hasta Rusia haciéndose pasar por jugadores profesionales de petanca y grandes ricachones que querían expandir este deporte hasta los confines del mundo costase la pasta que costase para hacerlo un deporte internacional y así ganar de una puta vez todas las medallas olímpicas en algún deporte.
El nombre de esta operación fue ocurrencia de un Burgalian enorgullecido por la capacidad de soportar el frío que tenían los de su "raza", dejando claro que ni siquiera en Siberia hace tanto frío como en Burgos.

De esta forma, 5000 Burgalians se montaron en un viejo tren de acero y viajaron por toda Europa, cumpliendo su papel y consiguiendo nuevos seguidores gracias a su táctica conocida como "la del circo"(para obtener más información, ve a la sección de tácticas de guerra o pincha aquí), hasta que el 7 de Noviembre, los Burgalians finalmente llegaron a Siberia y comenzaron a conquistarla a base de pedrada limpia al primer ruso sobrio que vieran, ya que los borrachos no suponían ningún problema e incluso algunos se unieron a los Burgalians asegurando haber nacido en España:

“Shisissashis… yo en veradad he naicido en Eshpaiña. Peo me vieni aquí cuando aera muy chiquititochiquititochiquitito… De hecho, mi coimida faforita es la coimida típica de allí: el uniocornio al aijillo” comentaba uno de los rusos que se unieron a los Burgalians (En realidad este ruso no sabía hablar español, pero con un poco de vodka, los rusos se transforman en una especie de super-hombres que lo saben todo y lo pueden casi todo, con algunas limitaciones como podrían ser el raro sentido del humor y la cogorza del quince que acaban por pillarse).

La conquista de Siberia se llevó a cabo  a una velocidad vertiginosa; en menos de un mes la mitad de ese territorio ya estaba casi completamente conquistado. Y es que en verdad, los rusos sabían que Siberia era un lugar demasiado improductivo para ellos, por lo que no les merecía la pena defenderse, aparte, claro está, que la mayoría de los rusos por esos lares estaban más borrachos que un alemán en el “Octoberfest” y lo único que querían era beber más Vodka y un poco de juerga sin importar si eran conquistados por los Burgalians.

Pero finalmente, el 17 y el 20 de Diciembre, cuando ya casi habían conquistado toda Siberia, tuvieron lugar dos batallas: “la Batalla por las Bodegas del Vodka” y “La Batalla de la Petanca” respectivamente.

En la primera de ellas, cientos de rusos borrachos de Vodka hasta las cejas pelearon contra los Burgalians por miedo a que destrozaran sus preciosas bodegas llenas de litros y litros de su líquido de la vida. Pero esta batalla no podía acabar de otra forma que haciendo las paces, ampliando las bodegas y todos ebrios bailando casi en pelotas alrededor de una hoguera gigantesca bebiendo más y más hasta que amaneciese.

La segunda de estas batallas, “La Batalla de la Petanca” tuvo lugar cuando los Burgalians rechazaron el VodkaDrinker (deporte principal de Rusia en aquellos tiempos) e implantaron la petanca. A los rusos esto no les sentó demasiado bien y atacaron con todo lo que tenían. Al no poseer armas de fuego ninguno de los dos bandos, la batalla acabó por reducirse a cientos de botellas de alcohol vacías y piedras siendo lanzadas por los aires para ver si acertaban a dar a alguno. Pero las avanzadas habilidades de lanzamiento que habían adquirido los Burgalians tras largos años de práctica jugando a la petanca terminaron por darles la victoria aplastante, tras la cual, la petanca pasó a ser un deporte internacional definitivamente.

El 4 de Enero, terminó la conquista de Siberia por parte de los Burgalians.
De los 5000 que habían comenzado el viaje, sobrevivieron 4000, a pesar de lo cual, el ejército Burgalian estaba compuesto por 8000 personas, los antes mencionados Burgalians de pura cepa, unos 1000 Europeos que fueron “adoptando” en su viaje por Europa y otros 3000 rusos que se unieron porque les resultaba divertido.

Pero para la desgracia de los Galegans, la información que estaban buscando no estaba en ningún lugar de Siberia, sino en la base secreta que hay debajo de las instalaciones subterráneas (secretas también) del Kremlin de Moscú.
Ese era ahora el nuevo objetivo de los Burgalians, pero ellos no sabían lo que estaba ocurriendo en el sur de Rusia... no conocían nada de la Campaña del Vodka, la cual, desencadenó una serie de acontecimientos que hicieron que el acceso a su preciada información fuera algo más que imposible.

martes, 5 de marzo de 2013

Orange Storm

    La Táctica de la Lluvia de Naranjas  (nombre en clave: Orange storm), consiste en que desde un barco de lo que viene a ser la parte que quiere joder, atacan mediante morteros encima de una plataforma a la parte jodida lanzándoles naranjas que al reventar contra el suelo sueltan el juguillo ácido acidificando el suelo e impidiendo que crezca trigo, manzanos, marihuana etc. De paso si dan a algún enemigo en la cabeza, eso que se llevan… Tiene un efecto secundario que afecta a regiones con aguas cercanas; vuelven el agua de la zona de color naranja, confundiendo a los peces que la habitan, estos están tan confundidos que se hieren a si mismos… en su defecto salen del agua en busca de agua limpia, no encontrándola y muriendo finalmente. (Táctica perteneciente a "La ofensiva de The Marmalade Company")













Parte jodida sufriendo la táctica Orange Storm

La ofensiva de The Marmalade Company

     Con el paso de los meses, los Galegans fueron erradicando todos los productos de The Marmalade Company que quedaban en sus dominios, hasta que finalmente, el 21 de Mayo, destruyeron la última sucursal de sus enemigos en la batalla de Las rias Altas.

     Esta ofensiva por parte de los Galegans causó pérdidas económicas de miles de euros, increíbles bajadas del precio de las acciones en bolsa y se destrozaron veintitrés calculadoras (que explotaron al hacer los enormes cálculos de las pérdidas). Esto, como es obvio, no le sentó nada bien a la compañía de la mermelada.
Decidieron entonces que había llegado la hora de contraatacar; prepararon su armamento y urdieron sus planes durante el mes de Junio y cuando parecía que la calma había vuelto a la tierra Galegan, The Marmalade Company volvió a la carga.

     Consiguieron formar un duro bloqueo alrededor de las costas gallegas gracias a sus poderosos buques tales como el “Prestige 2.0” el “Orangizer” e incluso algunos testigos aseguraron haber visto al gigantesco barco de “さかな” que obviamente compraron a una empresa japonesa cuando estaba a punto de ir al desguace, pero que consiguieron reparar convirtiéndolo en una máquina de matar Galegans y de pescar atunes (funcionalidad que les resultaba inútil, ya que no necesitaban atunes teniendo su mermelada de naranja).
Una vez consolidada esta formación tan agresiva, llevaron a cabo su estrategia más devastadora: La lluvia de naranjas, mejor conocida como “Orange Storm” (para obtener más información acerca de esto, ve a la sección de Tácticas de Guerra) con la cual consiguieron mermar las defensas Galegans y dejar maltrecha su agricultura, su economía y su dignidad.

     Tras varios días soportando el incesante bombardeo de naranjas, un reducido grupo de Galegans se juntó para plantar cara a la flota de sus enemigos. Libraron una cruenta batalla conocida como “Orange Battle” en la cual sucumbieron defendiendo sus tierras hasta el final. The Marmalade Company les capturó y les torturó exprimiéndoles naranjas en sus ojos hasta que suplicaran la muerte en la horca.

     En la tierra Galegan la frase “estamos jodidos mozo” pasó a ser el pan de cada día cuando venía la lluvia de naranjas del mediodía, de las seis de la tarde y de las doce y media de la mañana (a estas horas el bombardeo era más intenso) y todo les iba tan mal que apenas podían sobreponerse a esta situación. Pero finalmente, como si de un regalo divino se tratara, una compañía de aviones acudió en su ayuda. Llegaron un total de cincuenta aviones de Ryanair, dispuestos a cargar con los gallegos y a rescatarlos de aquella situación tan lamentable.
Miles de Galegans subieron a dichos aviones, pero lo que ellos no sabían era que en realidad todo esto se trataba de un falso rescate planeado por sus enemigos. El día C, los Galegans que creyeron haberse salvado, murieron cuando los aviones en los que iban se estrellaron, como cabía esperar. El punto de impacto conocido como “Crash Zone” fue en Francia a unos 75 kilómetros de París.

     Ante las devastadoras consecuencias que tuvieron dichos “accidentes” los franceses entraron en pánico y la histeria reinó en todo el País. No tardó mucho hasta que descubrieron la identidad de Jorge Cachopo, uno de los gallegos que yacía muerto entre los restos del avión. Pensaron que ellos habían sido los que enviaron este ataque y se unieron a The Marmalade Company en su campaña contra esa “escoria homosexual” como ellos los llamaban, ignorando por completo la fama que tenían ellos mismos en España por méritos propios.

     Tiempo después, el 19 de Agosto, los Galegans libraron la gran “batalla de las rías Baixas” contra The Marmalade Company y algunas tropas francesas en la cual, sus ofensivas a la desesperada y sus dones innatos para repartir hostias como panes les concedieron una victoria absoluta, haciendo así retroceder a toda la flota enemiga y consiguiendo una temporada para fortalecerse un poco más.
Tras esta abrumadora victoria, un Galegan médico encontró a un espía ruso tratando de sobrevivir entre los cadáveres que habían quedado en la batalla.

     “No paraba de hablar en un idioma muy raro y parecía que había sido poseído. Decía no sé qué mierdas de las naranjas, así que le calcé una buena hostia en la cabeza, lo dejé inconsciente y me lo llevé pa la base” aseguraba el médico.

     Tras unas intensas jornadas de torturas, tales como los pellizcos de un bogavante en los huevos, u obligarle a tragar tinta de pulpo mientras le lanzaban erizos de mar, consiguieron que hablase en cristiano y les dijese que él había sido uno de los que hicieron que el “Prestige” naufragara.

     Con todo esto, los Galegans habían conseguido zafarse un poco de la ofensiva de The Marmalade Company, pero aún tenían que lidiar con los franceses por lo que no estaban capacitados para ir a Rusia para descubrir cuáles eran los motivos de su espía…
Sin duda una campaña contra los rusos era algo que no podían hacer solos, así que tuvieron que pedir la ayuda de un aliado.

domingo, 3 de marzo de 2013

El comienzo de la guerra


Amigos, si están aquí es porque saben que hay algo que está comenzando a suceder ahí fuera. Tal vez ni siquiera imaginen de qué se trata, pero puedo aseguraros que no es nada que deba ser tomado a la ligera.
Mis compañeros del blog y yo nos hemos jugado la vida para viajar desde el futuro y así poder comunicaros lo que va a suceder. Queremos que hagáis algo para evitarlo, o por lo menos esperamos que estéis advertidos de lo que se os va a venir encima… queremos contaros la historia de la tercera guerra mundial.

Todo comenzó con la aparentemente inofensiva compañía de la mermelada de naranja, que como todo el mundo sabe, emplea las naranjas para crear esa rica mermelada con un intenso sabor y una textura extrasuave que tanto nos gusta probar cada mañana en nuestras tostadas del desayuno.

Las naranjas son peladas, cortadas en finos trozos y finalmente se cuecen junto con sus pieles para luego meterlas en botes. Estos botes irán dentro de enormes cajas que serán transportadas mediante barcos a las diferentes costas para abastecer a una población entera con sus productos.

Aunque sea difícil de creer, el punto de partida de la tercera guerra mundial radica en algo tan simple como esto. Uno de los barcos que transportaban la mermelada, el llamado “Prestige”, navegaba cerca de las costas Gallegas, cuando dentro del barco hubo un motín. Cierto grupo mató a toda la tripulación y arrojaron al capitán del barco por la borda para que fuera devorado por los tiburones. Acto seguido, se montaron en lanchas e hicieron estallar el barco con todo su cargamento ocasionando que naufragara cerca de la costa Gallega. Como es obvio, el vertido de mermelada de naranja contaminó las aguas produciendo que muchos peces, mariscos y demás animales marinos murieran ante el brusco cambio de las condiciones del agua.

Este suceso ocasionó una crisis en Galicia, ya que, aparte de la droga, su única fuente de ingresos rentable eran los productos que obtenían del mar, es decir, esos mariscos, peces y demás que habían muerto. Su capital descendió en picado. Las empresas de esta industria a duras penas podían continuar y hubo muchos despidos e incluso algunas empresas grandes quebraron debido a esta gran pérdida, por no hablar, claro está, de las empresas más pequeñas, que directamente no tuvieron ninguna oportunidad de salvarse frente a este suceso.

Esta situación generó gran polémica entre los gallegos y la compañía de la mermelada, y como nadie intervino ni quiso intervenir para solucionar el problema, los gallegos quisieron darle una represalia a la causante de todo esto.

Armados con cualquier arma o utensilio que pudiera ser utilizado como tal (garrotes, palos etc.) descargaron su ira y descontento sobre las sucursales de dicha empresa y sobre todos los productos que habían sido exportados anteriormente.

Esto no le sentó nada bien a la compañía de la mermelada de naranja, por lo que comenzaron una pequeña guerra entre ambos bandos: The Marmalade Company y los gallegos o como ellos se hacían llamar: Galegans.

Este, amigos, fue un humilde comienzo para algo tan catastrófico como lo fue, o mejor dicho será, la tercera guerra mundial.

AVISO

Hola amigos, soy uno de los redactores de este blog y antes de comenzar, me gustaría comentaros que el objetivo principal de este blog es contar la historia tal y como pasó o pasará desde diferentes puntos de vista (uno objetivo y otros más subjetivos) y ya de paso sacar alguna sonrisa, pero en ningún momento pretendemos causar molestia u ofender a nadie por cualquier cosa. Utilizaremos estereotipos y los exageraremos, ese será nuestro tipo de humor (sin tratar de ofender insisto) y esperamos que os guste.